GOZOS
Santa Iglesia Universal, repetid con alegría: Oh María sin pecado concebida, rogad por nosotros que recurrimos a Vos. Árboles de la montaña, que alzáis las copas al Cielo. nieves, escarchas y hielo, y bramador vendaval, bendecid a vuestra Reina, y repetid a porfía: Oh María sin pecado concebida, rogad por nosotros que recurrimos a Vos. Lindas flores de los valles, y flores de los jardines, violetas, rosas, jazmines, de blancura sin igual, exhalad blandos aromas, y repetid cada día: Oh María sin pecado concebida, rogad por nosotros que recurrimos a Vos. Estrellas del firmamento, blanca luna, sol ardiente, agua clara del torrente, tan limpia como el cristal, bendecid al Dios del Cielo, y repetid a porfía: Oh María sin pecado concebida, rogad por nosotros que recurrimos a Vos. Apacible primavera, crudo invierno ardiente estío, fuego, granizo y rocío y asolador temporal. Ensalzad a nuestra Madre, y decid con alegría: Oh María sin pecado concebida, rogad por nosotros que recurrimos a Vos. Pobres ancianos, enfermos; y jóvenes valerosos, niños que dormís gozosos, sobre el pecho maternal, alzad los ojos al cielo, y Repetid cada día: Oh María sin pecado concebida, rogad por nosotros que recurrimos a Vos. Almas nobles fervorosas, en el mundo desterradas, Vírgenes puras amadas, del monarca celestial, complaced a vuestro esposo, repitiendo cada día: Oh María sin pecado concebida, rogad por nosotros que recurrimos a Vos. Pueblos todos de la tierra, señores de las naciones, valerosos campeones, de este valle Terrenal, doblad con amor la frente, y repetid a porfía: Oh María sin pecado concebida, rogad por nosotros que recurrimos a Vos. Sacerdotes del Eterno, pontífices, confesores, y santos habitadores, de la Ciudad Eternal. Repetid mil y mil veces, llenos de santa alegría: Oh María sin pecado concebida, rogad por nosotros que recurrimos a Vos. Espíritus soberanos, que cercáis nuestros altares, ofreced nuestros cantares, al Rey del cielo inmortal. Y Ensalzad a vuestra Reina, repitiendo cada día: Oh María sin pecado concebida, rogad por nosotros que recurrimos a Vos.